Lenguaje y Cognición

El uso, adquisición, desarrollo y procesamiento del lenguaje es un tema ampliamente investigado desde perspectivas como la lingüística, la psicología, las neurociencias, etc. Su estudio es determinante no sólo porque nos permite conocer cómo se comunican los humanos y las características que tiene su código de comunicación, sino porque a través del lenguaje podemos explicar el pensamiento y conocimiento humanos. Prueba de la importancia del lenguaje son la buena cantidad de disciplinas que confluyen en la tarea de estudiarlo: desde la lingüística, pasando por la filosofía, la psicología, las neurociencias, la fonología, hasta las ciencias computacionales.

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La prominencia que ha adquirido el área de la lingüística cognitiva no sólo ha redundado en cambios radicales en las teorías que intentan explicar la mente y el desarrollo cognitivo, también ha impactado en otras áreas, como la educación o la inteligencia artificial; permitiendo ser un importante punto de referencia para el desarrollo de lenguajes computacionales, el mejoramiento de los sistemas de aprendizaje escolar, en los cuales impactan prácticamente todos los conocimientos relacionados con la comunicación o el aprendizaje del lenguaje o el área clínica que, donde un mayor entendimiento sobre la adquisición y el desarrollo del lenguaje es aprovechado para la prevención y tratamiento de trastornos y déficits del lenguaje.

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• Bienestar social. Las contribuciones que hace la lingüística cognitiva, con sus diversas áreas de investigación, son amplias, con el potencial de impactar en todas las esferas de la población: desde los niños y personas en condiciones típicas, que se benefician con conocimientos sobre los factores que optimizan los procesos de adquisición, desarrollo y uso del lenguaje; hasta personas en riesgo, con alteraciones en el lenguaje o con el empleo del lenguaje no oralizado, que obtienen beneficios de los desarrollos científicos en la materia.

• Diagnóstico y pronóstico de trastornos lingüísticos. Los nuevos avances en materia del uso y procesamiento del lenguaje, así como las diferentes perspectivas desde las que se atiende al fenómeno (como la psicología y las neurociencias) ofrecen cada vez más elementos para establecer diagnósticos más precisos y pronósticos más tempranos de los trastornos lingüísticos, por lo tanto también intervenciones más completas y mejor dirigidas.

• Educación y Lingüística Cognitiva. Más allá de la trascendencia del lenguaje en todas las facetas de la vida del ser humano, el papel clave en la educación es determinante, no sólo en el entendimiento de los aspectos cognitivos de la comunicación oral del humano o sus implicaciones en el aprendizaje, sino también porque sus conocimientos sientan las bases para un mejor entendimiento de la adquisición y desarrollo del lenguaje escrito, así como para la atención de otras formas de comunicación, como la lengua de señas o la que se da en los casos de trastornos comunicativos. Por ejemplo, con base en los conocimientos que se vayan generando, se tiene contemplado la creación de aplicaciones que permitan la estimulación y faciliten el aprendizaje en el desarrollo lingüístico y escolar de los niños.

• Naturaleza de la mente y el comportamiento. El lenguaje es, por excelencia, la referencia más importante sobre el funcionamiento y la estructura mental. Su estudio permite entender el pensamiento humano, ya sea asumiendo que el lenguaje es un reflejo de este pensamiento, pero también, según la perspectiva, presumiendo una influencia trascendente del lenguaje (y de las lenguas en particular) en el pensamiento y comportamiento humano.