Dejavu

La película Déjà Vu de Tony Scott (2006) es particularmente interesante para las ciencias cognitivas por su exploración del fenómeno de la precognición y la memoria. La trama, que gira en torno a un agente que utiliza una tecnología para ver el pasado en tiempo real, plantea preguntas fundamentales sobre la naturaleza del tiempo, la causalidad y cómo el cerebro procesa la información temporal. El film juega con la idea de que el "déjà vu", o la sensación de haber experimentado algo antes, podría ser un residuo de una precognición real. Desde la perspectiva cognitiva, la película sirve como un experimento mental que invita a reflexionar sobre cómo se construye la memoria episódica, la distinción entre recuerdo y percepción, y las posibles anomalías en la percepción del tiempo. Además, el concepto de manipular el pasado para cambiar el presente desafía nuestra comprensión del libre albedrío y las representaciones mentales que el cerebro elabora para dar sentido a la secuencia de eventos.